Rio Abajo Lyrics - Vengo - Ana Tijoux

Soy el agua, soy la vida 

soy la madre de la fuente cristalina, 

soy un canto musical de claves, 

soy la llave de este mundo y su brebaje, 

soy la lluvia que te brinda el aguacero, el chubasco permanente, el amor verdadero, 

soy el volcán del cielo, la lava creciente que recorre los campos de hielo, 

soy la hija de la tierra, soy la madre que cultiva los frutos y su siembra, soy el rocío que salpica fulminante, los rayos de sol un arco iris penetrante, 

soy dulce, soy salada, 

soy la pluma de la flecha andina con su danza, 

soy la esperanza de mi pueblo, 

soy la promesa intacta y la sangre de este suelo, 

soy el consuelo, soy la cura, 

soy la figura mas pura, 

soy la nieve, soy la bruma, 

soy la cascada que aceptan por catarata, 

la subita regata de vida que nos retrata 

yo soy la piel de todos 

soy el copo de nieve que llora por tus ojos 

soy esa fuerza que se prescipita en el centro del capullo donde nace la semilla 

tu no me puedes poner nombre, no me puedes apresar, mi amor es demasiado enorme 

no me sujetan tus cadenas, no quepo en tus envalses ni me atrapan tus sorpresas 

y aunque quieras controlarme yo fluyo rio abajo sin que puedas dominarme 

no me encierran tus botellas, yo regalo agua desde la cordillera 

no hay minera que pueda sustraerme, no hay manera que tu regadio pueda ni robarme 

la fertil abundancia yo traigo en mi equipaje, yo vengo a compartir mi vida en este viaje 

no hay fuerza que supere mi naturaleza ni maquina alguna que detenga mi destreza 

lo cantaba asi la abuela viva(vigua?) susurrandote .... 

Soy el agua, soy la vida 

soy la madre de la fuente cristalina, 

soy un canto musical de claves, 

soy la llave de este mundo y su brebaje, 

soy la lluvia que te brinda el aguacero, el chubasco permanente, el amor verdadero, 

soy el volcán del cielo, la lava creciente que recorre los campos de hielo 

Llevame? hacia el mar donde el sol si se esconde, hacia el horizonte donde cae el hombre 

quiero ver la estrella titanica donde soporta la lluvia de las ilusiones