Yo no soy aquel. Que tú te imaginabas. Yo no soy aquel. Que el mundo te ofreció. . En el que tú. Ciegamente confiabas. El hombre de tus sueños. Ese no soy yo.
Unos en el barrío la sancionan. Otros con su cuerpo se obsesionan. Ella pasa y no se mortifica. Cuando unas señoras las critican. . Llega a la esquina.