(Adolfo Ángel). Me resisto a creer que te vas. Ni siquiera comprendo por qué. Pero si te vas, si te vas. Te pido que no llores, pero sí recuérdame, recuérdame.
He pasado mucho tiempo ya sin ti. Pero más no puedo. Mi corazón no entiende que ya te perdí. Olvidarte quiero, pero no puedo. Sólo pienso en ti, siempre en ti.